Clases por videoconferencia en vivo
Se puede aprender sorprendentemente bien de manera remota.
Dictamos clases personalizadas en español, inglés, portugués y francés.
Contando con una buena conexión de Internet las imágenes fluyen y la clase resulta tan efectiva como una clase presencial tradicional.
Hemos desarrollado una metodología flexible que nos permite trabajar con alumnos de todas las edades y niveles.
Habitualmente hacemos dos videoconferencias simultáneas utilizando los programas preferidos de cada alumno: Zoom, Hang Out, Facetime, Whatsapp, Jitsi, 8×8, etc.
Forma de trabajo
Lo ideal es tener por lo menos 2 dispositivos, que pueden ser una notebook, una tablet o un teléfono.
Desde uno de ellos hacemos un plano general, en el que ambos nos vemos sentados al piano desde un costado.
Con el segundo dispositivo filmamos nuestro teclado desde arriba, para que el alumno reciba una imagen clara de nuestras manos en su tablet o celular apoyado en el atril de su piano.
Para facilitar la práctica, luego de cada clase enviamos videos y partituras de todo lo aprendido.
La frecuencia más tradicional para aprender el piano es de una clase por semana, de una hora de duración, pero esta se puede incrementar o reducir de acuerdo a las necesidades del alumno.
Recomendaciones técnicas:
Si el alumno puede conectar su salida de audio a un parlante externo, podrá escuchar mucho mejor que a través de los parlantes integrados de los dispositivos.
Nosotros utilizamos un micrófono externo y una tarjeta de sonido para captar audio de buena calidad. Además, contamos una conexión por fibra óptica que nos permite enviar y recibir audio e imágenes de gran definición.
Algunas plataformas de videoconferencia brindan mejor calidad de audio e imagen que otras, pero consumen más ancho de banda. Recomendamos testear la velocidad de conexión a internet con la que contamos para escoger la plataforma más adecuada. Un buen sitio para hacerlo es www.speedtest.net.
El método Gainza
Tocamos desde la primera clase. Desde el inicio se abordan temas sobre el teclado y con partituras. La lectura se va incorporando a la par del aprendizaje del instrumento.
Para tener en cuenta
Todos podemos aprender a hacer música. No importa la edad. Tampoco aquello de tener o no «condiciones musicales». Poco importa hasta dónde llegaremos. Lo importante es disfrutar del proceso. Los resultados son muchas veces sorprendentes.